Makro otro super en lucha

Los trabajadores renovaron junto al SECLA su unidad en la lucha
Paro total y próxima solución en Makro Avellaneda
Ya se analizan los parámetros para una respuesta positiva de la empresa


Los compañeros de Makro Avellaneda realizaron un paro total el día 02 de junio ante la falta de respuesta a los pedidos de actualización de adicionales que perdieron su valor relativo luego de la devaluación en detrimento del poder adquisitivo de los trabajadores.
Afortunadamente la empresa luego de la medida recapacitó en la consideración de este tema que venía hasta el momento evitando y ya se están realizando los contactos previos y los análisis correspondientes para subsanar estas diferencias económicas.

Una nueva demostración de unidad, sindicalización y compañerismo en esta empresa

Como ya había ocurrido en ocasión de la causa de todos los mercantiles, cuando el SECLA llamó a una medida de fuerza para que se paguen los días domingos al 100 % (ver recuadro), los compañeros de esta empresa renovaron el compromiso de unidad hasta las últimas consecuencias, y cuando la letra de los pedidos escritos fue ignorada, estuvieron dispuestos a alzar la voz y manifestarse de manera contundente.
El acatamiento fue prácticamente total y la solidaridad de uno con otros quedó demostrada en el acompañamiento que realizaron los trabajadores del turno tarde, viniendo lo más temprano posible para acompañar a los de la mañana, y estos quedándose a su vez para apoyar a aquellos hasta el horario de cierre.
La empresa permaneció cerrada de 7 a 22 hs., y si afuera se sintió el frío del invierno en la humanidad de los compañeros, también se sintió en las gavetas de las cajas que registraron una facturación de 0 $.

La táctica del desgaste encuentra su fecha de vencimiento cuando a la gente se le termina la paciencia, y siempre hay una coyuntura que actúa como detonante

Las paritarias se venían retrasando y los mercantiles veíamos como la intransigencia empresaria hacía que se torne casi imposible arribar a un acuerdo sobre la base de sus proposiciones absurdas.
Esas dilaciones en la negociación nacional es el gran reflejo de lo que se vivencia en las negociaciones por empresa. Estas en su conjunto juegan al desgaste y tratan de estirar los tiempos a menudo comenzando con ofrecimientos que lindan en lo absurdo y lo irrazonable.
Así sucedía en Makro, donde sus delegados habían presentado una nota ya en noviembre del 2006 en la que detallaban los montos sin actualización de adicionales tales como: “Asistencia y puntualidad”, adicional por descuento en compras “Artículo 58 del CCT 130/75 , “plus por manejo de Clark”, “plus por manejo de zorra eléctrica”, “adicional por depostación”, y otros temas que si bien algunos no están en el convenio colectivo, no es lícito que las compañías se sigan amparando en la falta de renovación de este –que data del año 1975 y no se corresponde con la realidad laboral actual- para no acomodar ni debatir ciertas cuestiones que derivan en la irrisoria paridad de remuneraciones para todas las actividades que hoy se realizan en un gran supermercado.

La dignidad no siente frío, no le teme a la intemperie, ni a los escribanos

Desde muy temprano, con la noche aun cerrada sobre ese paraje lindero al riachuelo y al puente Victorino de la Plaza, lo trabajadores fichaban sus tarjetas y se agrupaban en al entrada del personal para comenzar una jornada distinta.
Supieron proveerse de varios mates y termos y ya temprano se recibió el primer apoyo del churrero demostrado en forma de descuento y una sentencia “vamos aguanten”.
Los delegados se dividían las actividades: uno buscaba neumáticos en las gomerías y otro pan casero, y a las 7 cuando llegó la hora de apertura, ya el alba los encontraba a todos en la puerta de entrada repartiendo los volantes para que los clientes se enteren de los motivos de la medida. De porqué esos trabajadores que todos los días lo atendían, hoy no estaban en sus puestos de trabajo.
“La verdad que el día así se hace muy largo.” Se escuchó mucho esa frase durante la jornada. Claro, la gente de trabajo sabe que así es.
Al mediodía llegó uno de los representantes de la firma con un escribano al que no se le habló en absoluto a pedido de los representantes sindicales, este tuvo que limitarse a tomar lo datos de algunos clientes los cuales manifestaban que debían acceder a los pedidos. Estos apoyaron la medida a pesar de que por ser comerciantes casi en su totalidad, se veían aun más perjudicados que un cliente de compras para el hogar.
Promediando el mediodía, llegó el Secretario General del sindicato: Orlando Machado para dar su apoyo a los compañeros y comprometerse con la medida y la búsqueda de una solución productiva a la cual en el transcurso del día no se pudo arribar.
Así fue que los compañeros se encomendaron a la tarea de aguantar hasta la noche, choripanes mediante, con mates y facturas hasta horas después que la oscuridad había dicho presente de nuevo.
Mención especial aquí para las mujeres, algunas de las cuales tuvieron que tomar recaudos para dejar sus hijos al cuidado de alguien demostrando un compromiso ejemplar.
Hoy los compañeros saben y sienten que valió la pena. Que vale la pena comprometerse y el trabajo sindical de muchos años puede seguir rindiendo sus frutos: mejoras para los trabajadores.



Para el recuadro:

El día 04 de febrero fue la primera vez que se implementó en la sucursal una medida de fuerza total en un día laborable. Anteriormente, ante otros conflictos se había arribado a una solución a través de la negociación pero ante la negativa de pago del día domingo al 100 %, cuando el SECLA llamó a parar en los lugares de trabajo, Makro fue una de las empresas que tuvieron adhesión total de los trabajadores y gracias a las cuales se arribó a un acuerdo que hoy gozan todos los mercantiles del país.